Más adelante subiré el resto.
domingo
lunes
Paloma Muerta
Lunes, un día que tal vez me cueste olvidar por este mes.
Un día donde el karma me castigo de una manera exorbitante donde me estalló un sin fin de problemas, crisis vocacionales, desamores ajenos y problemas económicos.
El día en que volví a ser cesante.
Pero no olvidare ese momento alrededor de las 11 de la noche donde recibía la peor noticia de todas. Una notica de la cual en mi mente me decía que iba a suceder y así paso. Mientras veía como cada palabra del MSN se hacía real, no podía despegar mis ojos del monitor, no por el contenido sino por mi reacción a estas, estaba estupefacto, no podía creerlo pero era algo que me esperaba.
Fue en ese momento cuando uno de mis gatos llegó con una paloma muerta y la dejó bajo de mi cama. Mis hermanos llegaron y comenzaron a burlarse de mí porque tenía una paloma muerta y comenzaron a molestarme tirándome plumas que había ahí.
En ese momento yo solo quería irme de ahí, quería salir corriendo mandar todos a la cresta pero no podía ni siquiera hacer ese sonido con la nariz cuando uno comienza a llorar porque estaban todos mis hermanos presentes ahí. Les grite, les dije que me dejaran tranquilo mientras el MSN no dejaba de lanzarme palabras, las cuales llegaban como piedras a mi rostro.
Fue cuando por fin mis hermanos se tranquilizaron y cada uno se fue a su respectivo cuarto.
Puse mis brazos sobre el escritorio y luego lentamente baje mi cabeza hacia ellos, luego de dar un gran suspiro mientras cerraba mis ojos de forma resignada comencé a escribir.
Escribí todo lo que se me ocurría, todo lo que brotaba de mi mente, casi de forma dadaísta.
Mientras escribía me daba cuenta que cada palabra me salía fácilmente por el hecho de que ya las tenia planeadas, recordaba cada palabra que escribía porque sabía que este momento llegaría y siempre lo supe, pero nunca quise admitirlo.
Después de todo lo que sucedió fui a mi pieza y me encerré, me coloque detrás de la puerta y vi que el suelo estaba lleno de plumas que se movían lentamente con el viento que entraba por mi ventana la cual abrí por el mal olor de la paloma muerta.
Fue ahí, mirando las plumas cuando comencé a llorar.
Un día donde el karma me castigo de una manera exorbitante donde me estalló un sin fin de problemas, crisis vocacionales, desamores ajenos y problemas económicos.
El día en que volví a ser cesante.
Pero no olvidare ese momento alrededor de las 11 de la noche donde recibía la peor noticia de todas. Una notica de la cual en mi mente me decía que iba a suceder y así paso. Mientras veía como cada palabra del MSN se hacía real, no podía despegar mis ojos del monitor, no por el contenido sino por mi reacción a estas, estaba estupefacto, no podía creerlo pero era algo que me esperaba.
Fue en ese momento cuando uno de mis gatos llegó con una paloma muerta y la dejó bajo de mi cama. Mis hermanos llegaron y comenzaron a burlarse de mí porque tenía una paloma muerta y comenzaron a molestarme tirándome plumas que había ahí.
En ese momento yo solo quería irme de ahí, quería salir corriendo mandar todos a la cresta pero no podía ni siquiera hacer ese sonido con la nariz cuando uno comienza a llorar porque estaban todos mis hermanos presentes ahí. Les grite, les dije que me dejaran tranquilo mientras el MSN no dejaba de lanzarme palabras, las cuales llegaban como piedras a mi rostro.
Fue cuando por fin mis hermanos se tranquilizaron y cada uno se fue a su respectivo cuarto.
Puse mis brazos sobre el escritorio y luego lentamente baje mi cabeza hacia ellos, luego de dar un gran suspiro mientras cerraba mis ojos de forma resignada comencé a escribir.
Escribí todo lo que se me ocurría, todo lo que brotaba de mi mente, casi de forma dadaísta.
Mientras escribía me daba cuenta que cada palabra me salía fácilmente por el hecho de que ya las tenia planeadas, recordaba cada palabra que escribía porque sabía que este momento llegaría y siempre lo supe, pero nunca quise admitirlo.
Después de todo lo que sucedió fui a mi pieza y me encerré, me coloque detrás de la puerta y vi que el suelo estaba lleno de plumas que se movían lentamente con el viento que entraba por mi ventana la cual abrí por el mal olor de la paloma muerta.
Fue ahí, mirando las plumas cuando comencé a llorar.
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